6.12.06

Entre las sábanas y el despertador

Hay días que la hueva se apodera de uno. Comienza por las sábanas. Mas en días como estos donde el frío cala y uno tiene sus sábanas de franela más dos pants, dos playeras y una sudadera encima. El calor de las sábanas cuando suena el despertador obliga a posponer el sueño durante cinco minutos más, mismos que se convierten en media hora más e incluso, en un poco más.

Debería existir alguna regla laboral en la cual uno pudiera trabajar desde su casa (para eso está la Internet, en parte) con las cobijas encima y un chocolante caliente. El mundo es una cosa muy rara. Los seres humanos somos cosas muy raras. ¿Qué no es una cosa rara?

30.11.06

Abstracto I

"Las masas, ellas, no eligen, no producen diferencias, sino indiferenciación -conservan la fascinación del medio que prefieren a la exigencia crítica del mensaje." Jean Baudrillard, Cultura y simulacro. ¿Quién es la masa?

El metro es un circo 3.0

Ayer en la mañana iba en el metro como la mayoría de los días. Iba sentado leyendo cuando en alguna estación se subieron dos comadres que se sentaron una frente a la otra. Platicaban sobre varias cosas, las cuales desconozco pues yo estaba metido en mi libro. Así estábamos cuando arranca el metro y entre estación y estación se frenó como si se le hubiera detenido en seco el metro de adelante, como si una carriola con un bebé hubiera aparecido de la nada. Todos los usuarios sufrimos la fuerza de la inercia aplastando y siendo aplastados. Retomó su marcha, llegó a la estación, arrancó y lo volvió a hacer. Las comadres que ya mencioné comentaron entre sí el suceso. Una dijo que seguro el operador era nuevo y que estaba aprendiendo a frenar. A lo que le contestó la otra: "Seguro es mujer".

24.11.06

No domingo deportivo

Comienzo con el miércoles donde el Cruz Azul perdió 2-0 ante las Chivas. Yo había pensado que tal vez el resultado sería 2-1 a favor del Guadalajara. Me faltó que los cementeros, mis cementeros metieran un gol. Confío en que en su estadio, el Azul, lograrán vencer a las Chivas y pasar a la siguiente ronda.

El jueves los Delfines de Miami derrotaron 27-10 a los Leones de Detroit. Con esta victoria ya son 4 las que suman al hilo y colocan su récord de 5 ganados y 6 perdidos con 5 partidos por jugarse en la temporada. Quien quita y dan la sorpresa colándose a los playoffs. Por cierto, este nuevo QB de los Delfines, Joey Harrington, ha resultado bastante atinado. Ojalá permanezca así.

Por último, Indianapolis perdió el invicto ante Dallas. Me dio mucho coraje, pero ya se fue.

22.11.06

New York, New York

Durante la comida de hoy surgió una controversia que me obligó a citar que durante niño viví en Nueva York. Mis amigos, sentados a la mesa, comenzaron a mofarse de mí y a decirme cosas como "No tienes que presumirnos otra vez que viviste en Nueva York"; "Si tanto te gusta Nueva York por qué estás aquí en el Defectuoso". En realidad no fue para presumir mi estancia allá, sino para ejemplificar el argumento sobre el que se discutía. Sin embargo, cada que hablo de Nueva York me emociono y tal vez por eso lo cito con la frecuencia que mis amigos dicen que lo hago.

Durante nuestro crecimiento hay cosas que como niños nos marcan. Nueva York lo tengo rotulado en todo mi ser. No son marcas corporales las que me recuerdan lo maravilloso que fue vivir dos años en el estado de Nueva York (aclaro, no fue en Manhattan, que es lo que la mayoría de las personas conocen por las películas, sino en Scarsdale, a 45 minutos en tren de Manhattan), está en la mayoría de las cosas que soy ahora. Son sobre todo, mis recuerdos, los imborrables, los que permanecen para recordarme que la felicidad y la alegría pueden cohabitar en un niño de 9 años. Nunca me había sentido tan bien como cuando viví allá.

Vivía en unos condominios horizontales que tenían una alberca. Estos condominios estaban rodeados de naturaleza. Frente a mi casa había una falda de monte con árboles y piedras. Cerca de la casa había bosque, un lago que en invierno se congelaba y patinaba. La escuela a la que iba, pública, era hermosa. El método de enseñanza era activo, lo cual me fascinaba. Era la típica escuela gringa, pero me encantaba. La escuela estaba entre dos campos enormes donde se podía jugar futbol soccer, pero también futbol americano y béisbol.

Cuando tuvimos que regresarnos, yo no quería, y aún pienso que me gustaría regresar a vivir allá con mi familia. Mis años más sanos física y mentalmente. Se dice mucho sobre la cultura yanqui, pero lo cierto es que para mí ha sido la experiencia más importante de mi vida.

"This vagabund shoes are longing to stray...."

21.11.06

El metro es un circo 2.0

Volvió a suceder. De hecho, es inevitable. El metro hoy venía lleno, aperrado. Yo iba sentado leyendo El fin de la locura (excelente novela, realmente recomendable) e incluso así, sentado, iba apretado. Afortunadamente no padezco claustrofobia, porque era desesperante. Mi trayecto dura aproximadamente media hora (¿esto lo mencioné en la entrada pasada sobre este tema?). El de hoy fue de casi una hora. Cuando llueve entiendo que se mojan las vías y que el tren debe ir lento para no ocasionar un accidente. Pero hoy, ¿qué había? ¿Por qué la pazguatez? Nada más falta que el frío también afecta el mecanismo de los trenes. Lo único que supimos las decenas de personas que íbamos en el transporte fue que "debido a una falla la marcha del tren será lenta". Pero eso lo anuncian cuando me faltaban tres estaciones para bajarme.

Estábamos detenidos en alguna estación (me parece que fue Xola) cuando escuché a lo lejos vidrios rotos chocando entre sí. En ese momento pensé que se acercaba el faquir, aunque mi duda era dónde iba a realizar su acto, con el metro así de lleno no veía espacio vacío. En efecto, no lo realizó, pero su perorata, vaya que la llevó a cabo. "Les pido una moneeeedaa que me puedan regalaaaar, algo que no afecte su economíiiiia. Se los agradeeeezco". Es evidente que finge, que él no habla así, ¿por qué lo hace? No lo sé, pero ya no parece ser tan efectivo como tal vez antes lo fue. En el espacio donde yo me ubicaba, nadie le dio una moneda. Incluso una pareja bastante humilde que traían a su hija de unos 10 meses con gripa, comenzaron a comentar lo falso que se oía. El dicho dice que de tanto que se decía que allí venía el lobo, ya nadie lo creyó cuando realmente venía.

Cerraré esta intervención con algo que me causó alegría por la mañana que abordé el metro. La música ambiental que había en las estaciones era la música de Star Wars. Con eso llegué animado, y un poco apurado también, al trabajo.

Luna en casa

Ayer llegó a nuestra casa un nuevo miembro. Es una perra bóxer blanca que lleva el nombre de Luna. Nació el 18 de septiembre y es muy juguetona. Al parecer se adaptó rápido a la vida de la casa. Mi hijo está feliz con ella y parece que el sentimiento es mutuo. Hemos estado aprendiendo cómo es educar un hijo, ahora nos toca aprender a educar a Luna. Por el momento, lo que puedo decir es que como a las 4 de la mañana tuvo mucho frío porque al parecer entra un chiflón por donde pusimos su cama. Al darnos cuenta la cambiamos de lugar. Tengo que irme a pensar ahora dónde dormirá y dónde hará sus necesidades dentro de la casa cuando salgamos de paseo. Es una hermosa perra.

Fríos, grises, nubes y tristeza

¡Qué pinche frío está haciendo! Las heladas del fin de semana han estado infernales. Hoy no se salva de ser la excepción. Según los noticieros, permaneceresmos titiritando de frío por al menos 48 horas más. Dicen que hay una onda fría que proviene del Pacífico. No lo sé, no soy metereólogo. Lo que sí sé es que el frío está para quedarse entre las sábanas de franela que ya comenzamos a poner todos en nuestras casas. Tal vez puedan pensar que qué exagerado y tal vez sí lo soy un poco. Lo cierto es que no me gusta el frío y en seguida van las razones:

1. Porque te congela.
2. Porque no me gusta ponerme capas y capas de ropa (entre menos ropa traiga, más cómodo me siento).
3. Porque ahora ha estado acompañado de días nublados y los días nublados son tristes.
4. Porque los días fríos son grises y el gris es un color triste.
5. Porque estos días me deprimen.
6. Porque no puedo salir a la calle porque me muero de frío.
7. Porque se me congelan los pies.
8. Porque en la ciudad de México ni siquiera neva (al menos la nieve haría vistosos los días fríos).
9. Porque no me gustan y ya.
10. Porque soy un ser solar.

Innumerables discusiones he tenido con todo tipo de gente, culta-inculta, humilde-rica, profesional-sin título, y con todos coincido en que es imposible estar de acuerdo sobre este tema. Seguro hay algo de belleza detrás de todo lo gélido, pero ese mismo elemento impide que lo pueda apreciar. Prefiero los días soleados, calurosos, llenos de luz (de color) y con el aire ligero. ¿No les parece que el frío es estricto, cuadrado, rígido?

10.11.06

Zeit 1.0

¿Qué es el tiempo? ¿Es una medida? ¿Es real? ¿Es una creación humana? ¿Es una categoría humana? ¿Qué es? De pequeño me hacía esta pregunta, aunque un poco distorsionada. No sólo me preguntaba (y jugaba) con el tiempo, sino también con el espacio. Incluso alguna vez compartí mi inquietud con mis padres, ya que ellos formaban parte de mi elucubración que era la siguiente: "¿Hubiese sido el mismo, me gustaría lo mismo, sería yo de haber nacido con otros padres? ¿Si mi papá y mi mamá se llamaran distinto hubiera existido yo? Evidentemente no me llamaría como me llamo, pero mi nombre no define mi yo (aunque tal vez en cierto sentido sí lo haga).

Mis padres no supieron qué contestar y me dijeron algo como: "No, tendrías rasgos físicos distintos". ¡Obvio!, pero el tema central no era ese, sino el YO. ¿Qué es el Yo? ¿Quién soy Yo? ¿La mente? ¿El cerebro? ¿Mi cuerpo? ¿Mi alma? ¿Todos los anteriores? ¿Quién? La pregunta rondó mi cabeza durante varios años de mi infancia (he de haber tenido 6 o 7 años cuando se los pregunté a mis padres).

¿Tendrá razón Hume al afirmar que el Yo no existe y que es una mera asociación de ideas? El empirista afirma que no existe un recipiente del Yo, no hay una sola impresión del Yo. Es la memoria quien se encarga de generar esta idea que en la realidad no existe. Y allí aparece el tiempo: la memoria, el tiempo, el pasado hecho presente. De acuerdo con Hume, lo que preguntaba no tenía sentido pues el Yo no existe o, mejor dicho, la respuesta a mi duda es muy sencilla de responder: Tú, es decir mi Yo, no serías el mismo porque Tú (Yo) es una construcción de varias ideas (ni siquiera impresiones) que has hecho a lo largo de la vida y, por lo tanto, totalmente circunstancial al periodo y lugar en el que habitas.

En otra ocasión analizaré la respuesta a mi pregunta desde otra perspectiva. Citaré otro filósofo y trataré de entender(me) qué es el Yo. Una cosa es cierta en este momento, yo iré a cenar.

9.11.06

¿Qué pasó?

Me pregunto qué habrá pasado. ¿Moví algo? ¿Hice algo indebido? ¿Por qué el post de Metallica no está con la misma separación entre líneas que los otros? Misterios cibernéticos que no sé si lograré resolver. Esta entrada me ayudará a saber, tal vez, qué ha sucedido.

Metallica 1.0

Así es, soy un fan de Metallica. Es mi banda favorita. La foto que ahora aprecian contiene a la primera alineación que creó las primeras canciones de este grupo de Thrash Metal. La primera alineación tenía a Ron McGovney en el bajo en lugar de Cliff Burton, pero con Ron no crearon una canción original. Afortunadamente llegó Cliff al grupo y colaboró con su sapiencia musical y su influencia clásica. ¿Por qué pongo esta foto, si el Metallica de ahora tiene a Robert Trujillo en el bajo y a Kirk Hammett en la otra guitarra (en lugar de Dave Mustaine)? Me he preguntado, ociosamente, qué hubiese sido de Metallica de haberse quedado estos cuatro miembros de la fotos juntos, tocando el mejor Thrash Metal que ha existido. ¿Tendríamos álbumes como Load, Re-Load y St. Anger? Como lo anticipé, es ocioso porque nadie puede saberlo, pero lo cierto es que estos cuatro crearon canciones que se quedarían entre nosotros: The Four Hourseman (que con Megadeth, la banda que creó Mustaine al salir de Metallica se llama The Mechanix), Jump in the Fire, Metal Milita, Ride the Lightning y una de mis favoritas, The Call of Ktlulu.

Tal vez sea cierta la teoría de que dos genios no pueden estar en la misma banda. Hetfield y Mustaine tienen dos egos demasiado grandes para, probablemente, convivir en un grupo (aunque el ego de Ulrich no es menor, pero es más manejable). Incluso pudo haber sido eso, no eran dos egos sino tres. Claro, sé que la razón por la cual sacaron a Mustaine de Metallica fue por su desenfrenada adicción a las drogas (algo que Metallica siempre ha condenado, léanse las letras de Master of Puppets, siempre y cuando no fuera alcohol.... MORE BEER). Lo sé, pero también creo que la lucha de egos fue demasiado fuerte.

Lo único cierto es que los trés álbumes que mencioné anteriormente (los últimos tres que ha sacado Metallica) no tienen la calidad de un Master of Puppets o del And Justice for All. El álbum negro se salva musicalmente hablando, aunque allí dejaron de hacer Thrash Metal. No tienen la calidad y la forma más fehaciente de corroborarlo es viendo cuántos sencillos exitosos, de esos que perduran en la mente, de esos que son atemporales, hay después del álbum negro: niguno, cero. Ojalá Metallica algún día vuelva a hacer lo mejor que ellos saben hacer: THRASH METAL. Los experimentos déjenselos a las Nu Metal Bands.

7.11.06

Risa sangrienta

Hoy manché mi camisa blanca y mi corbata de sangre. No, no me reventaron, como alguien sugirió cuando iba camino a una clínica. Sencillamente un buen chiste en la sobremesa reventó un vaso en la profundidad de mi nariz. Me reía cuando sentí la gota bajar y caer sobre mi mano. Me levanté con apuro y me dirigí hacia el baño. "Es algo sencillo, pensé. Seguro no tardo ni un minuto en regresar a la mesa". Pero no fue así. Esta vez la hemorragia fue de grandes ligas.

Cuando yo era muy pequeño a mi hermana le sucedió algo similar. Horas con una hemorragia nasal hasta que lograron llevarla a un hospital donde la cauterizaron. Sin embargo, a mí no me sucedían esas cosas... hasta hoy. El lavabo del baño de la oficina era una hermosa pintura donde se mezclaban el blanco y el rojo. Ojalá hubiera tenido una cámara a la mano para fotografiar esa escena. Sencillamente, sublime. Grandes cantidades de sangre brotaban de mi nariz sin que yo pudiera hacer algo para detenerla; a lo mucho, un kleenex que en pocos segundos terminaba invadido de mi líquido rojo.

Un amigo fue por mí al baño y al ver la escena, me preguntó que cómo me sentía, a lo que respondí que bien. "Vámonos a una clínica, ya," me dijo. En la clínica me pusieron un tapón en la fosa derecha al cual le inyectaban adrenalina (dijo el médico que para ayudar a cerrar). Como un tapón fue insuficiente para tamaña hemorragia, el médico decidió introducirme otro, lo cual me dejó con una fosa nasal a la africana. Mencionó que a más tardar en media hora debía detenerse la hemorragia y que yo guardara reposo. (Por cierto, el médico me preguntó varias veces si yo no era coco porque, según él, mis orificios nasales estaban muy deteriorados. Le contesté riendo que no, por supuesto que no.)

Regresamos al trabajo y la hemorragia no se detenía. Mi amigo el Villa decidió que me daría aventón a mi casa para que reposara. En el camino de regreso me sugirió ir a ver a su otorrinolaringólogo. Accedí. Luis, el otorrino, me quitó los tapones que traía y me limpió un poco la nariz. Ya llevaba dos horas de hemorragia continua (afortunadamente ésta comenzó cuando ya había terminado de comer). Posteriormente me introdujo un algodón con anestesia. A los pocos minutos regresó, me quitó ese algodón y con un instrumento que llamó "perla" me cauterizó. Al principio no me dolió nada, simple líquido dentro de la nariz cauterizando el gran vaso (así lo dijo el médico) que se me había reventado bien adentro en mi fosa derecha. Pero cuando terminó, hasta lagrimita salió de mi ojo. ¡Cómo dolió eso!

Hasta entonces, tres horas después, dejé de sangrar. No me asusté, pero sí fue muy incómodo. Otra cosa que no sabía y que también descubrí hoy fue que la sangre irrita. La garganta la tenía destrozada de tanto que me tragué mi sangre (al menos estoy sano, mis glóbulos rojos están llenos de hierro).Ahora descanso en casa narrándoles esta historia. Tal vez les parezca asquerosa, asombrosa, inútil, de mal gusto o simplemente aburrida. No importa, en algún lado tenía que publicar esta experiencia que a mí sí me asombró. Después de hoy, pienso que la gente sí puede morirse de risa (o a consecuencia de ella).

6.11.06

Domingo deportivo 1.0


Hoy me siento bien. Ayer los Delfines de Miami le quitaron el invicto a los Osos de Chicago en el Soldiers Field, casa de los Osos. Aunque los Delfines dan lástima esta temporada (y ya desde algunas atrás) la victoria de ayer puede ser suficiente para mantener la alegría el resto de la temporada. Me dio gusto ver el partido y ver al nuevo quarterback lanzar pases para anotación. A ver qué sucede la próxima temporada, porque con récord de 2 ganados y 6 perdidos dudo que esta lleguen a playoffs.

El Cruz Azul sigue sin perder después de su catastrófico desliz. Ayer empató a 1 con el Toluca (como odio el sistema de juego de los Diablos, odio los equipos defensivos en cualquier deporte). Falta la última fecha y a la liguilla. Los aficionados de la máquina esperamos que esta no sea otra temporada en donde nos eliminan en la primera ronda.

Finalmente, para terminar con mi domingo deportivo, los Potros de Indianapolis vencieron a domicilio a los Patriotas de Nueva Inglaterra (equipo que detesto en la NFL). Los Potros siguen invictos. Aunque mi equipo son los Delfines, espero que los Potros sean campeones del Super Tazón este año. Ojalá Peyton Manning no padezca de la maldición de Dan Marino: líder pasador de la liga en prácticamente todas las categorías y ningún anillo de campeonato. Manning es un quarteback espectacular, de esos que dan gusto ver jugar; ojalá logre el tan ansiado anillo.

1.11.06

Iztaccihuatl I


Atardece.

La mujer dormida asoma impúdicamente sus senos blancos,
sus senos cubiertos por la nieve de noviembre,
congelados,
sueñan la inmortalidad de su forma.

Duerme.
Flota entre las nubes.
Hierve de frío en las alturas
de un valle que alguna vez fue limpio.

Ya no suspira.
Ya no canta los mensajes de los dioses.
Ya no abraza la tierra con su fuego.
Ahora encanta en su silencio la belleza
y enamora los ojos que la miran
enloquecidos.

Poco a poco los párpados de la noche
apagan el cielo
y en el fondo imagino que los blancos senos
son cobijados por el calor de las estrellas.

31.10.06

El metro es un circo

Hoy tomé el metro saliendo del trabajo. En realidad es muy sencillo y es una ruta muy cómoda. Me subo en el metro Tacuba y me bajo en Portales, sin necesidad de transbordar, sin el estrés del tráfico (que con las marchas se pone cada vez peor... ¿cuándo comprenderemos los mexicanos que la civilidad es fundamental en la sociedad? Bloquear calles no lo es.) y lo mejor es que la mayor parte del tiempo logro sentarme, lo que me permite leer durante el trayecto que al menos dura media hora. Así he leído durante lo que va del año una docena de libros.

Es inevitable convivir con los ambulantes, los "ciegos", los "de la calle", los faquires que están dispuestos a cualquier cosa por unos centavos. Es denigrante toparse con esto en el metro. He visto ciegos que saliendo del metro caminan muy bien, doblan su bastón y son uno más en la calle. He visto cómo niños de la calle exageran la tonada para que los pasajeros creamos realmente que su origen es la calle. Aunque las autoridades del metro prohíben la venta de piratería dentro de las instalaciones, también he visto muchos (demasiados) ambulantes (prácticamente uno por estación). Es muy molesto porque voy leyendo y cuando menos lo espero tengo la bocina en mi oído a un volumen escandaloso que busca captar la atención del posible comprador, quien por diez pesos muchas veces compra un disco en blanco. Pero hay dos cosas que me molestan aún más: las señoras que se arrastran por todo el vagón haciendo las veces de un bolero y los faquires.

La primera vez que me sucedió me asustó, pues nunca esperé que un ser humano estuviera arrastrándose por el piso del vagón con un trapo tratando de limpiar los zapatos de los pasajeros. Sobresalté, miré hacia abajo y me encuentro con una señora mayor con rostro desencajado pidiéndome una limosna. Grotesco.

El segundo, el faquir, es aún más desagradable por todo lo que representa. Un ser que en una franela trae vidrios rotos de todos los tamaños, texturas y colores que se puedan imaginar. Lo coloca en una de las entradas al vagón y comienza a hacer piruetas cayendo de espalda y de pecho contra los vidrios, al tiempo que reza una cantaleta: "Perdonen las molestias que esto les ocasiona, pero más les molestaría que me llevara sus billeteras. Es desagradable, pero es honesto". ¿Qué? ¿Acaso el que no me asalte le da permiso para exhibirse de esa forma frente a los pasajeros? ¿Qué tipo de razonamiento es este? Hay dos formas de llamarlo: Chantaje o, en lógica, Ad misericordiam. Darle dinero a alguien porque se clava vidrios, voluntariamente, en el cuerpo es totalmente irracional. Quien lo hace fomenta que esa persona siga atentando contra sí misma e, incluso, contra el pasaje. Porque realmente se dejan caer sobre los vidrios. He visto los hilos de sangre que escurren de sus espaldas.

Hoy, decía al inicio, me regresé en el metro. Dos estaciones antes de llegar a mi destino apareció uno de estos faquires. Frente a mí había una familia sentada (padre, madre e hija). En cuanto el señor comenzó con su acto circense la niña (como de 10 años) volteó el rostro. No podía ver un acto tan antinatural. Con asco les preguntó a sus papás que por qué el señor hacía eso. La mamá le dio una explicación. Nadie en nuestro vagón le dio un peso y se cambió de vagón para repetir su acto.

¿Cuándo el chantaje dejará de ser el medio para conseguir los fines? ¿Cuándo podremos viajar en el metro sin tener que ser testigos de actos por los cuales no pagamos para ver? ¿Cuándo el mejor transporte público que existe en la ciudad de México, y uno de los más limpios, dejará de servir de pista a todos estos cirqueros?

Naturaleza perfecta


La perfección no existe entre los seres humanos. Las formas perfectas son productos de la continua mentalidad del hombre por sentirse dios. El círculo de 360 grados sólo habita en los recónditos laberintos de la mente. ¿Por qué entonces concebimos un concepto como el de perfección? ¿Realmente se nos introduce al nacer, como afirma Descartes? De ser así, ¿quién lo introduce? ¿Cuál fue el parámetro que hemos tomado para albergar semejante monstruosidad? Ya es un cliché hablar de la perfectibilidad del ser humano. No por ello deja de ser menos cierto que los seres humanos podemos mejorar lo que hacemos. Mi duda es, ¿siempre podemos mejorar o existen límites? Al observar la realidad me percato más de los límites que existen que de lo contrario. ¿Por qué, entonces, nosotros pensamos que podríamos ignorar lo evidente?

De hecho, aquí está lo interesante. La realidad está limitada y, hasta donde sabemos, eso incluye al universo, que si bien está en expansión continua, no hay materia nueva, sino la misma que existió desde la Gran Explosión, sólo que abarcando más espacio. (En este momento no me meteré a la discusión de cuál es el espacio que dicha masa está ocupando; si es un vacío o un lugar hueco.) Parece ser, entonces, que la idea de perfección sí tiene un referente tangible. Todo lo limitado nos lo recuerda, reminiscientemente, una y otra vez. La perfección es el límite total. Alcanzada la perfección el movimiento deja de existir, porque como bien lo advirtió Heráclito, el movimiento es cambio. Lo perfecto no puede cambiar, porque entonces no sería perfecto.

La inmovilidad de la perfección me recuerda a una estatua que, incapaz de expresión alguna, está allí. Pensemos en una estatua humana. Tomemos El pensador de Rodin. Ese ser que sentado sobre una piedra está en una actitud de análisis, dilucidando tal vez el misterio del mismo ser humano, resolviendo la dualidad y contradicción que habita en cualquier hombre, no puede dejar de pensar. Sería imposible que nos comunicara sus conclusiones, que se levantara efusivamente para compartir unas palabras. Lo que imposibilita esto es la naturaleza de El pensador. Una estatua no debe hablar, moverse, gesticular, llorar o reír. Su condición, dada por el escultor, es la de permanecer por siempre como fue concebida y esculpida.

El ser humano, por el contrario, tiene una naturaleza cambiante. La rigidez no es propia de nosotros. Desde el instante en el que el espermatozoide fecunda al óvulo el movimiento es incesante. A diario se nos mueren células que sustituimos por nuevas. El cabello crece, las uñas, nuestros huesos y músculos también. Incluso cuando hemos alcanzado el crecimiento físico "total" hay movimiento. La sinapsis es otro ejemplo de ello, que ya sea despiertos por medio del análisis o dormidos arrojándonos imágenes para soñar, mantiene las células cerebrales en movimiento. Los únicos objetos que se mantienen estáticos (y esto también habría que revisarlo ya que los electrones, protones, neutrones y demás partículas subatómicas nunca reposan) son aquellos que nosotros creamos o los inertes. Si lo dudan, tomen una cámara en la cual puedan dejar abierto el diafragma por un segundo o dos y enfocar a cualquier ser humano. Al tomar la fotografía el ser humano fotografiado saldrá ligeramente movido, así hayan sido sólo dos segundos, mientras que los objetos circundantes, no.

Podemos querer hacer las cosas lo mejor posible (pero incluso eso ya implica una subjetividad, pues, ¿qué es lo mejor?). Ser perfectos como personas es imposible. Realizar obras perfectas también. La perfección es un paradigma a seguir que debemos saber nunca alcanzaremos mientras estemos vivos. No podemos ser estatuas ni aún queriéndolo; nuestra naturaleza impondría lo que es. La naturaleza misma, el universo, está constantemente en movimiento. El único ser que es perfecto en toda la existencia es Dios, pero como la perfección no es una naturaleza propia del ser humano, tampoco entendemos lo que implica una aseveración tan fuerte. Incluso la lógica es coja antes Dios. Lo único válido es la intuición y entonces nos quedamos con un Dios que cada quien percibe a su modo y que me parece, así debe permanecer hasta nuevo aviso.

¿Por qué entonces estresarnos por ser perfectos en lo que hacemos? ¿Por qué violentar nuestra naturaleza de esa forma? Léase que tampoco apelo a la mediocridad, pues ella es consecuencia de la holgazanería. Creo en el equilibrio (¿será el equilibrio la perfección?). Creo que el ser humano debe obedecer a su naturaleza y no olvidar que es un ser racional. La perfección, si es que existe para noosotros, algún día llegará (tal vez sea cuando logremos unir correctamente el binomio naturaleza-razón).

30.10.06

Desayuno dominical


Ayer desayuné un delicioso club sándwich en Coyoacán a las 2 de la tarde. Lo acompañé con una cerveza y una exquisita plática sobre filosofía, budismo y encuentros mayas. Ordené el club sándwich, que insisto estaba delicioso, porque a las 2 de la tarde ya no sirven desayunos. Desde que era pequeño me preguntaba el por qué de esos horarios en domingo. ¿Que no el domingo es para descansar? Siempre existirán los madrugadores. Bien por ellos. Sin embargo, habemos otros que gozamos la calidez de las sábanas a las 11 o 12 del día. ¿Qué tiene de malo eso? ¿Qué tiene de malo tomar el primer alimento entre la 1 y las 2 de la tarde? ¿Por qué si quiero desayunar fuera de casa a esa hora no puedo ordenar huevo con jamón acompañado de un par de panes tostados y un jugo de naranja grande? Al parecer, las reglas establecidos por los comercios restauranteros están regidas por la costumbre del madrugador. Los que escogemos vivir de noche y dormir de día tenemos que desayunar la comida, qué ironía (una ley de la vida).