23.5.07

Tres aproximaciones a la idea de la muerte

Aproximación cómica

Ayer por la noche -aunque debería decir madrugada pues era la 1am- prendí la tele para relajarme del día y poder dormir. Justo estaba por iniciar uno de mis programas favoritos, According to Jim. Decidí que lo vería y me enfundaría en las sábanas. Comienza el programa: Jim está ordenando la casa y dejando todo impecable. Sus hijos, asombrados, le preguntan qué le pasa, él no es así. Jim contesta que quiere que la casa luzca impecable pues Cheryl, su esposa, regresará pronto del funeral del tío Donald y seguro estará triste. Una de sus hijas intrépidamente le pregunta: "¿Qué sucede después de que uno muere?" Con naturalidad y aires de sapiencia Jim le responde que la gente llora mucho y luego vende la ropa. La verdad es que la respuesta de Jim no está alejada de lo que los seres humanos solemos hacer. Yo tengo mucha ropa de parientes cercanos, lejanos y no parientes que ha llegado a mi clóset. Lo que es una verdad contundente es que la gente llora mucho.

Aproximación filosófica

Sócrates fue condenado a muerte bajo los cargos de corromper a la juventud y de impiedad, el cual se dividía en que no creía en los dioses de la ciudad al mismo tiempo que introducía nuevos dioses. En la Apología de Sócrates se muestra que los argumentos de Anito, Melito y Licón son infundados y la verdadera razón para condenarlo era el peligro intelectual que representaba para las élites en el poder. En el Fedón se describe el momento en el que bebe la cicuta, el veneno que lo mataría. Sócrates está en una celda charlando con sus amigos sobre la inmortalidad del alma. En eso entra Jantipa, su esposa, echa un mar de lágrimas y gritando desesperadamente. Sócrates pide que se la lleven pues desea pasar sus últimos momentos con sus amigos en paz, sin los aspavientos de su mujer. Critón, preocupado por su maestro, le sugiere que se escape, que incluso ya sobornó a un guardia para que pueda irse y seguir viviendo. La integridad de Sócrates se muestra cuando éste comenta que en primer lugar no se irá de allí pues si no puede hacer filosofía allí en Atenas, no le interesa hacerla en otro lugar y dejar de hacer filosofía no puede ser una opción. Además, menciona, no hay que temer la muerte y sentencia: "La filosofía es una preparación para la muerte" (66e). Aquél filósofo que tema a la muerte no ha comprendido lo que es la Verdad. “¿Consideramos que la muerte es algo? [...] ¿Acaso es otra cosa que la separación del alma del cuerpo? ¿Y el estar muerto es esto: que el cuerpo esté solo en sí mismo, separado del alma, y el alma se quede sola en sí misma separada de cuerpo? ¿Acaso la muerte no es otra cosa sino esto?” (Fedón, 66c y ss.). Y más adelante agrega: "[...] y entre éstos, los que se han purificado suficientemente por medio de la filosofía, viven absolutamente sin cuerpo por todo el tiempo siguiente y llegan a moradas aún más bellas que las anteriores, que no es fácil describir ni alcanza ahora el tiempo. [...] es necesario no ahorrar esfuerzo para participar, durante la vida de la virtud y la sabiduría. Bella es, en efecto, la recompensa, y grande la esperanza” (Fedón, 114c). Interesante. Dado que un filósofo busca en su vida la verdad debe comprender que ésta no será hallada en plenitud aquí sino cuando el alma haya logrado librarse del encarcelamiento del cuerpo.

Aproximación vivencial

Hace ya varios años murió mi padrino de bautizo. De él aprendí a apreciar mejor la música, a Remedios Varo, el gusto por la traducción (él se dedicaba a traducir del inglés al español manuales de medicina y muchas otras cosas más), los bóxer (siempre lo recuerdo con sus dos perros junto a él) y muchos buenos modales. Conviví poco con él pero me llevé buenas cosas de las ocasiones en las que estaba en su compañía. El velorio lo llevamos a cabo en una funeraria cerca de Bucarelli. Como suele ser costumbre, la gente cercana al difunto se aproxima al féretro para charlar unos momentos con él. Nunca antes lo había hecho. Me acerqué para agradecerle por todo lo que de él había aprendido. Me llevé una impresión bastante fuerte al verlo. Nunca antes había visto un muerto. La imagen que inmdiatamente me vino a la mente fue la de un muñeco de cera. Quedé pasmado ante la inanimación de quien un día antes aún era mi tío. "¡Wow!", pensé, "este cadáver definitivamente está exento de alma". No sé si el alma sea la que realmente nos otorga la animación como afirmaba Aristóteles, pero es un hecho que al morir no sólo tu cuerpo físico deja de funcionar. Estoy convencido -y al ver a mi tío confirmé mi convencimiento- que los seres humanos poseemos alma y que al morir se desprende del cuerpo y vaga en otra dimensión. Seguro esuchó mis pensamientos y pudo ver a todos los que estuvimos allí cuando él ya no era ese cuerpo.

11 comentarios:

Zoe dijo...

Esto me recuerda a una larcha, bueno un monologo-dialogo que tuve con Leprechaun, en el cual hablamos del espiritu y el alma.... según lo que se sabe el alma viene a ser la parte tangible, es decir, se aprecia en vida cuando puedes realizar actos con ella y el espíritu es la parte que queda cuando se muere... Siempre he pensado que quizás divaguemos un buen tiempo dentro de este mundo como seres que andan buscando kizas algun perdón. Por otro lado la teoria de los Budistas de que reencarnaras cada vez mas también es algo aceptable... pero que pasa después cuando estas muerto pero en una vida alterna .. no será que debes volver a morir para poder renacer?...

Zoe dijo...

larcha = charla..... uyyy creo que esto del happy hour hizo sus estragos ...

snakearian dijo...

uhhhh
la muerte, ciertamente no agregaste las distintas posuras religiosas al respecto, personalmente creo que todas indican que solo estamos de paso en este mundo y nos preparamos para algo mejor.....
prefiero creer en estos momentos que la muerte es solo un paso de nuestra existencia.... un paso necesario, imprescindible para poder llegar a morir, porque, aunque sea redundante, sino vivimos no podemos morir....
ahora, biologicamente entendemos que sucede cuando todas la funciones basicas del cuerpo cesan, de modo tal que en su totalidad el cuerpo "paraliza sus labores"...


producto de eso me pregunto.... se podrá morir por partes....
se podrá dejar de existir por etapas... que pasa cuando nos morimos por dentro???


saludos,
bye

casi yo dijo...

Lamentablemente, yo estoy con Jim. Cuando te mueres, la gente que te quiere llora mucho y después vende o regala tu ropa.

Yo creo que lo que nos otorga la animación no es el alma. Es la vida.

¡A vivirla!

Roberto Rivadeneyra dijo...

Snakerian: Pienso que la vida se justifica cuando la analizamos a través de la muerte. De lo contrario, no existiríamos.

Casi yo: Definitivamente hay que vivir la vida. Pero si la vida es lo que anima al cuerpo, ¿es igualmente un elemento intangible como lo es el alma?

Saludos,

K dijo...

Roberto: tu blog parece un poco complejo, pero está muy adecuado. Enhorabuena encontrar tus reflexiones, un abrazo,

K

Roberto Rivadeneyra dijo...

K: ¿Complejo y adecuado? Trato de pensar cómo amalgamar ambos. Lo importante es que te haya gustado.

Saludos,

. dijo...

Hola Roberto!..Que me había perdido tu blog!! que cabeza la mía!! Y me gustó mucho...¡cuanto pensamiento junto!! jeje...y este tema "la muerte"..digamos que ...por ahora...mejor no pensar..je...me parece que en todos lo sentidos..."por estos momentos de mi vida..."mejor no pensar"!...jeje....
No le tengo miedo a la muerte..sí, quizás a morirme y no poder hacer todas las cosas..que me gustarían......ooii..pero en este momento mi cabeza es un torbellino..asique mejor..........
Besotess!! Y muy bienvenido a "mis Noches"!!
Cuidate mucho!!

Alter Ego dijo...

Pues a mi la que mas me gusta es la aproximacion comica, aunque conozco demasiado bien la aproximacion filosofica. Saludos

Roberto Rivadeneyra dijo...

Luna de abril: pues habrá que aprovechar ese torbellino que gira en tu cabeza para generar leer tus ideas. Qué bueno que te gustó. Tú también eres bienvenida a Los Demiurgos.

Alter ego: La aproximación cómica es muy buena porque al mismo tiempo que logra hacerte reír sobre un tema del cual la gente no suele reírse, te arroja una gran verdad de cómo solemos los seres humanos enfrentar la muerte. Gracias por agregarme.

Saludos,

Roberto Rivadeneyra dijo...

...para leer tus ideas.

Prometo que habrá más aproximaciones. Apenas el fin de semana pensaba en la mitológica, la onírica, la científica, la fílmica, la religiosa (aunque la budista parece haberse tratado ya en esta sección, jaja) y algunas más.