30.4.10

Recuerdo de niño

En Nueva York a los 10 años.


De niño quería ser beisbolista. Ese sueño se me frustró por razones que ya no quiero ni mencionar (y no tiene que ver con una lesión). Un amigo alguna vez me dijo que es absurdo querer cumplir con nuestros "sueños", que nadie termina siendo lo que de niño quería ser. Difiero y pienso que de haberse dado la circunstancia y que yo pudiera haber seguido jugando beisbol, en este momento formaría parte de algún equipo de las ligas mayores. Recuerdo que cuando viví en Nueva York era el más rápido de toda mi generación. Así es, un mexicano que ni inglés sabía hablar tenía más potencia y velocidad que el resto de mis amigos estadounidenses. Recuerdo también que en alguna ocasión me dieron el diploma al jugador más versatil por mi capacidad para jugar cualquier posición dentro del campo de juego (aquí en México jugué de pitcher, parador en corto y jardinero central). Recuerdo que en los torneos era de los que más se embasaban. Recuerdo que fui, junto con otro buen amigo, el único que conectó un cuadrangular en un torneo de beisbol de Nueva York (aún conservo esa pelota). Recuerdo que cuando salíamos al recreo o era el capitán de uno de los equipos o el primero en ser seleccionado, ya fuera para soccer, basquetbol, beisbol o americano. Recuerdo con nostalgia aquéllos años en donde tenía tan claro que lo mío, para lo que era bueno, útil, era el deporte. Hoy, en cambio, trato de hacerme bueno en una profesión. Dilemas de la libertad.

1 comentario:

isolino dijo...

Nomenclatura

¿Qué elementos debe uno considerar al momento de deliberar nombres para un hijo? Todos los matices se concentran en el futuro del niño y en su profesión.

1. Científicos
Los hombres de ciencia no se llaman Jorge o Martín. Para ellos debemos pensar en apelativos como Ambrosio, Giordano o Tomás.

2. Literatos
Si a nuestro hijo le vemos traza de escritor, los nombres a considerar son del tipo Gregorio, Fausto, Anabel o Matilde.

3. Bufones
Si pensamos que nuestro vástago tiene madera de cantante, comediante o actor de telenovelas, debemos buscar nombres artísticos para liberar al crío de ese trabajo, trabajo que no hicieron, por ejemplo, los padres de Teresa Presmanes Corona, aka Daniela Romo o los de Bertha Elisa Noeggeratt Cárdenas, aka Dulce o Guadalupe Contreras Ramos, aka Lupita D'lessio.
Así, si consideramos que uno de nuestros hijos será cantante hiphop podríamos ponerle K'leb o algo así.