23.12.08

La verdad

El ser humano está llamado a la verdad. El conocimiento es ineludible e imprescindible en la vida de todo individuo. En cada momento que transcurre la verdad se le manifiesta. Una a una estas verdades van moldeando la consciencia, la cual se determina en ciertos esquemas rígidos bajo los cuales actúa. De esta manera la persona va configurando su propio ser. Todo inicia en el conocimiento. La búsqueda por la verdad será el trayecto de toda su vida. Nadie desea la mentira, salvo para descubrir en ella la verdad. A pesar de todo el esfuerzo, la verdad es escurridiza y definirla implica discusiones, debates y maldiciones.

¿Qué es la verdad?, preguntan algunos filósofos y mucha gente con ellos. En sí, la formulación de la pregunta está bien planteada; no tanto así la respuesta que se espera de ella. Al momento de construir cualquier pregunta inevitablemente estamos anticipando una respuesta. Cuando la que se nos da no satisface el concepto anticipado, seguimos buscando. Sin embargo, allí está el error, en esperar algo específico. Cada pregunta es un abanico de posibilidades que previamente no debe ser sentenciada. Lo único que se consigue con esta actitud es imponer a la verdad una verdad, que termina por subjetivarla. Entonces se abre la Caja de Pandora y aparece el relativismo, el subjetivismo, el escepticismo y toda corriente que antes que buscar la verdad, la difama.

4 comentarios:

Rodricus dijo...

La verdad como trayecto... me gusta, Chungue.

"¿Y qué es la verdad?"

Guillermo Núñez dijo...

Supongo que sigues de vacaciones, un abrazo Chunga.

JoséManuel dijo...

Como Heidegger, pues.

JoséManuel dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.