11.6.08

Genio maligno

Hoy, al despertar, lo hice un tanto aliviado. Pensé que amanecía en viernes. "Hoy iré a trabajar y luego viene el fin donde dormiré y dormiré", me decía mientras el agua de la regadera caía sobre mi cuerpo. Todo iba bien, llevé a cabo mi rutina como cualquier día, y cuando llegué a mi oficina, el lugar desde donde narro esto ahora, y tomé mi agenda para ver cómo íbamos en la edición de la revista me enteré que hoy no era viernes sino miércoles. ¡Vaya decepción! Ahora que lo pienso, achaco mi confusión a aquel Genio maligno del cual hablaba Descartes. Sí, fue él quien mientras dormía me engañó para que despertara con la idea de viernes. ¿O fue mientras despertaba?

2 comentarios:

Enrique G de la G dijo...

Se le llama "Síndrome de Robinson Crusoe": una impaciencia por Viernes, jajaja...

a. dijo...

cada vez que entro a tu blog y veo la fotito de tu persona, me caes bien !...
saludos !