En este momento acaban de encender una podadora afuera de la ventana de mi oficina. El escándalo es tremendo. (Odio el ruido, ya lo saben.) Comienza a filtrarse por la ventana, que siempre tengo abierta, el olor a pasto. Reflexiono sobre el olor. Es peculiar, no encuentro referente. Ni siquiera sé si me gusta o no. Sólo sé que su olor sería imposible sin una podadora --de cualquier índole--. Sólo en el corte de los filamentos verdes es que el pasto desprende su olor. ¿Es como su sudor? Yo huelo cuando sudo y ese es el olor que atrae o repele a otras mujeres. El pasto no tiene ese problema, no necesita atraer a la pasta para hacer pastitos. Por eso me imagino sólo huele cuando lo podan, es decir, cuando sangra. Desconozco si Aristóteles observó tal detalle, otra diferencia entre el alma vegetativa y la animal, porque eso sí, sudar, generar feromonas, es una reacción química propia de los animales. Pero somos humanos.
3 comentarios:
Ese Chunga:
1. Se ve que lo de las efemérides es de algún gachupín, porque mencionan políticos, futbolistas y hasta cocineros...
2. El olor a pasto recién cortado es excelente. Por ahí hay un perfume que lo remeda, pero no recuerdo el nombre. Buena la relación con el sudor.
3. ¿Cómo que blogueando desde la oficina? A ver si no te corren, jaja...
Chunguita
Como sabes, mi nariz es prominente y mis placeres son fundamentalmente aromáticos. Tanto que m i trabajo idóneo es catador de perfumes en París.
Coincido con el Quics (y lo saludo desde acá con una nota: Elizabeth Arden y Gap tienen perfumes "sabor" pasto) y reconozco que no hay aroma que me reporté más felicidad que el del pasto recién cortado.
Sin duda, no es un asunto de sudar, sino de sangrar
Ese Kics,
Tienes mucha razón sobre la 1.; qué gracioso, un cocinero... La 3. fue en un momento de dispersión, necesaria, para continuar la talacha de editor.
Un abrazo!
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