26.11.07

El futuro

El otro día jugaba en mi Play Station cuando llegó mi hijo y me arrebató el control. Desde entonces todos los días me pide que se lo ponga un rato y no hay poder que lo haga compartirme el control. Me impresiona que a sus dos años con siete meses ya esté manipulando los videojuegos. No por eso dejaré de fomentarle el deporte y actividades al aire libre, pero sí soy un acérrimo defensor de los videojuegos. Creo en sus poderes neuronales.

5 comentarios:

Mallén dijo...

Permíteme decirte que tu hijo tiene unos cachetes que están para morderlos de lo redonditossss!!!!
Una vez desahogada en ese detalle, sí, creo que los video juegos pueden ser muy útiles. Pero depende de la temática del juego. No hay mejor modo que aprender jugando, y ojo, que los niños son una esponja absorbe conocimientos. Así que existe allí una gran potencialidad que, bien llevada, puede obrar maravillas.

Anónimo dijo...

jajajajaja yo tengo recuerdos muy agradables con los videojuegos, en cada hogar deberia haber una consola de videojuegos.

Rodricus dijo...

Nuestra generación tuvo videojuegos de un botón y, muuuuuchos años después, seis. Kaleb en cambio comienza con ¿diez? ¿doce?

***
En el 2060, Kaleb Rivadeneyra reciba el premio Nobel de Química, seguramente pronunciará en su discurso: "Y agradezco a mi padre, quien multiplicó mis neuronas permitiéndome videojugar desde los dos años".

Aplausos.

Enrique G de la G dijo...

El otro día husmeaba en la página de Joshua Bell, porque estuve en un concierto que dio aquí, y dice que su pasatiempo favorito son los videojuegos (http://www.joshuabell.com/personal).

Unknown dijo...

Bueno en realidad yo nunca juego videojuegos y no hago deporte y muchas cosas buenas que podría hacer... Los niños de hoy tienen "botonitis". Cosa que me encanta...